sábado, 19 de mayo de 2007

Entre dos aguas

8:15 de la mañana, el joven se mete en el tren, que llega con dos minutos de retraso, piensa que hoy es el peor día de su historia como individuo de este planeta, es de aquellos días que no se sabe porque pero te crees la peor bazofia del planeta. El tren está repleto de gentes con sus periódicos sus reproductores de mp3, y demás artilugios que hacen de esos desplazamiento, unos viajes agradables, este joven mira el interior de su bolsillo y se da cuenta que se ha olvidado el ipod, y para colmo no cogió el periódico gratuito que le ofrecieron en la entrada de la estación, así que no le queda otra, que seguir perdido en sus pensamientos u observar a las gentes de ese vagón. Sin vacilar mirar por la venta y se da cuenta que está diluviando, se dice a si mismo, ¿pero como puede ser? me voy a poner perdido. Llega a su destino, entre empujón y empujón encuentra la salida del vagón, sus pies se mueven por inercia, hace las escaleras mecánicas. Se para ante esa puerta donde se ve el diluvio, suspira, y sin pensarlo mucho más se dirige hacia ese desconcertante panorama, camina sin mirar atrás, con su rostro mojado, y sin querer pensar en sus pies ya calados, de repente se encuentra entre dos grandes charcos de una gran profundidades queda en medio de ellos sin saber por donde cruzar para no acabar totalmente empapado, aun se salvan sus rodillas, esos charcos no son normales hace un momento no estaban allí, el muchacho no sabe que hacer parece que la gente de su alrededor no se da cuenta de su situación. Intenta cruzar uno de ellos, pero al pisar no encuentra el fondo con su pie, ahora el chico si que no sabe que hacer, esto no puede estar pasando de verdad, piensa para si mismo. De repente sin esperarse eso, una gran anguila de cabeza de tiburón con sus dientes afilados surge de uno de los charcos, y el chico se queda paralizado ante esa situación, la gente de su alrededor sigue sin darse cuenta de lo que pasa, si es que de verdad está pasando, el tío no se mueve no sabe que hacer, está esperando que alguien grite, pero no sucede, así que en nada se ve engullido por ese enorme mostró, y nota como poco a poco pierde su vida.
La gente de su alrededor sigue sin darse cuenta, están pensado, en que mal día hace, en como de mojado va a llegar a la oficina, en esa canción que le a echo de un trayecto un buen momento, la gente sigue en lo suyo, mientras el chico muere engullido, por algo que sale de un charco profundo, que surge de la nada.

No hay comentarios: